La poliomielitis es una enfermedad altamente contagiosa ocasionada que, en su forma más grave, provoca lesiones a los nervios que causan parálisis, dificultad para respirar y, en algunos casos, la muerte.

La campaña de 2021 bajo el lema “Fin a la Polio” busca apoyar a los esfuerzos de erradicación a nivel mundial, incluyendo continuar con la vacunación contra esta enfermedad y mantener las acciones de vigilancia epidemiológica. 

Según lo describe la Clínica Mayo, el virus de la poliomielitis puede transmitirse por contacto directo con una persona infectada o, con menor frecuencia, a través de agua y alimentos contaminados. Los portadores del virus de la poliomielitis pueden propagarlo durante semanas en las heces. Las personas que tienen el virus pero que no tienen síntomas pueden transmitirles el virus a otros.

En los EE. UU., el último caso de poliomielitis natural ocurrió en 1979. Hoy en día, a pesar de los esfuerzos mundiales por erradicar la poliomielitis, el virus de la poliomielitis sigue afectando a niños y adultos en zonas de Asia y África.  

Según señala la Organización Panamericana de la Salud, la poliomielitis es una enfermedad neurológica de alta contagiosidad que afecta principalmente a niños y es producida por tres tipos de poliovirus. Se propaga a través de la vía fecal-oral, es decir, cuando las heces de una persona infectada llegan a la boca de otro individuo, algo que puede suceder a través de agua o comida contaminadas. 

Hasta 1990, cada día el mundo reportaba 1.000 niños con parálisis flácida a causa de poliomielitis. Actualmente solo se registran casos en Afganistán y Pakistán. La enfermedad es altamente contagiosa y sus síntomas son similares a los de la gripe. En 1 de cada 200 casos el virus destruye partes del sistema nervioso. Este ataque ocasiona la parálisis permanente en piernas o brazos. Además, el poliovirus también puede atacar las partes del cerebro que ayudan a respirar, lo que puede causar la muerte.

La región de las Américas no ha vivido casos de poliomielitis desde hace 30 años. El último, data de 1991 en la región de Junín, en Perú. En Ecuador, la última persona detectada fue en 1990 y vivía en el cantón Durán,  provincia del Guayas.

poliomielitis afecta principalmente a los niños menores de 5 años. Sin embargo, cualquier persona que no esté vacunada corre riesgo de contraer la enfermedad.

Complicaciones

La poliomielitis paralítica puede provocar parálisis muscular temporal o permanente, discapacidad, deformidades de los huesos y la muerte.

Prevención

La forma más eficaz de prevenir la polio es la vacunación.

Vacuna contra la poliomielitis

La mayoría de los niños en Estados Unidos reciben cuatro dosis de la vacuna inactivada contra la poliomielitis en las siguientes edades:

  • Dos meses
  • Cuatro meses
  • Entre los 6 y los 18 meses
  • Entre los 4 y los 6 años, cuando los niños comienzan a asistir a la escuela