La enfermedad de Chagas es una afección parasitaria, sistémica, crónica, transmitida por vectores y causada por el protozoario Trypanosoma cruzi, con una firme vinculación con aspectos socio-económico-culturales deficitarios.

Es una patología endémica en 21 países de las Américas, aunque las migraciones de personas infectadas pueden llevarla a países no endémicos de América y el Mundo.

El principal mecanismo de transmisión es vectorial, por hemípteros (chinches), de la Subfamilia Triatominae (con alimentación hematófaga). Infectan personas expuestas a su picadura, al depositar sus heces infectadas en heridas de la piel o sobre mucosas.

 Otras modalidades de transmisión son transfusional, congénita, transplantes de órganos u oral. Se estima que, en la Región, cerca de 100 millones de personas están en riesgo de infectarse, unos 6 millones infectadas, con 30.000 nuevos casos anuales por todas las formas de transmisión, motivando 12.000 muertes anuales.

 Este 2021, la conmemoración del Día Mundial del Chagas busca visibilidad y atención al Chagas y elevar el nivel de conciencia en todos, sobre la importancia de mejorar la detección precoz, lograr la ampliación de la cobertura del diagnóstico y el acceso equitativo a la atención clínica para Chagas

El Día Mundial de la Enfermedad de Chagas se celebra el 14 de abril para concientizar sobre esta enfermedad desatendida. Se celebró por primera vez el 14 de abril de 2020, tras la aprobación y el respaldo recibido por la Asamblea Mundial de la Salud en la OMS en mayo de 2019.

Este 2021 se busca dar visibilidad y atención al Chagas y elevar el nivel de conciencia en todos, sobre la importancia de mejorar la detección precoz, lograr la ampliación de la cobertura del diagnóstico y el acceso equitativo a la atención clínica para Chagas.

 

El parásito causante de la enfermedad de Chagas es la Trypanosoma cruzi, conocidos como vinchucas, chinches, pitos entre otros muchos nombres que varían dependiendo de la región.

La enfermedad de Chagas, denominada también tripanosomiasis americana, ha sido calificada como una «enfermedad silenciosa y silenciada», no solo por su lenta evolución clínica y frecuentemente asintomática, sino también porque afecta principalmente a poblaciones desfavorecidas y con acceso restringido a la atención de salud y otros servicios básicos.

Se estima que, en las Américas, existen alrededor de 6 a 8 millones de personas infectadas con el parásito que causa la enfermedad, cuya mayoría ignora su condición.

 También se estima que en las Américas hay más de un millón de mujeres en edad fértil que podrían estar infectadas y que corren el riesgo de perpetuar la ocurrencia anual de miles de recién nacidos que llegan al mundo ya infectados por transmisión congénita.

El Chagas es una enfermedad desatendida, y por lo mismo pasa aún más desapercibida que otras enfermedades.

La prevalencia de la enfermedad de Chagas principalmente entre las poblaciones pobres de América Latina continental; se está detectando con más frecuencia en otros países y continentes. Se estima que a nivel mundial mueren entre 10.000 a 12.000 personas al año. 67 millones de personas en las Américas están en riesgo de infección.

Es hora de acabar con la estigmatización y la discriminación de las personas afectadas por la enfermedad de Chagas.

Tratamiento

La enfermedad de Chagas puede tratarse con benznidazol, y también con nifurtimox, que matan al parásito. Ambos medicamentos son eficaces casi al 100% para curar la enfermedad si se administran al comienzo de la infección en la etapa aguda, incluso en los casos de transmisión congénita. 

El medicamento no debe administrarse a mujeres embarazadas ni a personas con insuficiencia renal, así mismo, la eficacia del medicamento se ve afectada si transcurre mucho tiempo del inicio del tratamiento.

Finalmente, en caso de reactivación de la infección este mismo medicamento puede ser nuevamente usado.