Entrevista de Leo Santos – Diario Salud

Durante la pandemia, la inmunidad a enfermedades cayó un 24% según el Ministerio de Salud Pública. El miedo a contagiarse se convirtió en la razón principal de los padres para suspender el proceso de vacunación a sus hijos. Sin embargo, la importancia de las vacunas sigue vigente más que nunca. Su suspensión o aplazamiento puede conllevar graves consecuencias no solo para un individuo sino para toda la sociedad.

DiarioSalud conversó con la pediatra María Augusta Guerrero quien se refirió a la importancia de la inmunización infantil

¿Qué son las vacunas?

Las vacunas son sustancias y compuestos que al administrarse en el cuerpo pueden lograr una respuesta inmune a través de la creación de anticuerpos ante cualquier tipo de enfermedad.

¿Qué tipos de vacunas existen?

Hay vacunas de virus muertos, virus vivos atenuados o componentes antigénicos hechos por ingeniería genética.

¿Cuál es la importancia de las vacunar a los niños y a qué edades deben llegar las primeras vacunas?

Es importante porque la vacunación es la única manera de contrarrestar aquellas enfermedades que son inmunoprevenibles. La primera vacuna que se pone es la BCG que es para enfrentar un vacilo atenuado, y así prevenir la tuberculosis. Esta vacuna, al igual que aquella que es contra la hepatitis B, se la realiza a tan solo unas horas del nacimiento. Es recomendable que las dos se pongan inmediatamente, sin embargo, la BCG puede administrarse hasta el primer mes de vida.

Además de estas dos, ¿cuáles son las principales vacunas que deben tener los niños para generar anticuerpos y prevenir enfermedades infecciosas?

Hay un esquema de algunas vacunas. Al segundo, cuarto y sexto mes de vida, se pone una vacuna de pentavalente que combate al Tétanos, Tos Ferina, Hepatitis B, Difteria e influenza. Además de esas cinco, también se suele añadir Polio oral y Rotavirus. De igual manera, en estos meses de vida también se pone la vacuna contra el Neumococo. Todas estas forman parte del Programa Ampliado de Inmunizaciones Obligatorias. Sin embargo, hay una que otra vacuna que el Ministerio no pone y se puede acceder a nivel privado. Un ejemplo es aquella contra el Meningococo, que es una bacteria muy rara pero que tiene una alta tasa de mortalidad (9 de cada 10 personas). Otra que se suministra es aquella contra el Hepatitis A, pero que por problemas de costos no ha entrado al país ya cuatro años. De igual manera administramos la vacuna contra el Papiloma Virus a varones, ya que el Ministerio de Salud la suministra solo en niñas a partir de los nueve años de edad.

¿Es mejor administrar vacunas combinadas o por cada enfermedad?

Hay vacunas que se pueden combinar, y si hay autorización para hacerlo es mucho mejor porque aceleras el proceso. Con una sola vacuna ya controlas cinco enfermedades, además de que evitas pincharle al niño constantemente. Además de la pentavalente, está la SRT que trabaja contra el Sarampión, Paperas y Rubiola. Esa vacuna la pone el Ministerio de Salud en el primer año de vida. Sin embargo, en los consultorios privados también añadimos contra la Varicela. Por lo tanto, los niños salen vacunados con Sarampión, Paperas, Rubiola y Varicela.

¿Las vacunas infantiles aún necesitan refuerzos para incrementar su nivel de efectividad?

¡Sí! Tanto la BGC como la SRT necesitan refuerzos. Justamente, aquellas vacunas que se ponen al cuarto y sexto mes son los refuerzos que se proporcionan para enfrentar la tuberculosis pulmonar diseminada y la meningitis tuberculosa. Los refuerzos son importantes porque fortalecen la memoria inmunológica, es decir, se necesita cumplir un cierto número de dosis para que la inmunidad quede ya sellada.

¿La efectividad de las vacunas varía de si es suministrada por vía oral o inyección?

Depende. Por ejemplo, antes se ponía Polio Oral pero ahora se lo hace de manera intramuscular, y no porque una manera sea mejor que la otra, sino que es para minimizar cualquier tipo de riesgos. Entonces depende, la eficacia de la vacuna no es mayor o menor si es oral o intramuscular, aun así, la mayor parte de las vacunas llegan a través de inyección, solo el Rotavirus y Polio son vía oral.

En una visión específica de la pandemia, la OMS advirtió que más de 80 millones de niños en el mundo no se vacunaron debido a la emergencia sanitaria. ¿Qué pasó en Ecuador?

Yo trabajo en un consultorio privado, así que la situación es distinta a la del Ministerio de Salud. La vacunación es costosa, así que aunque se haga medicina particular y un control a los pacientes, la mayoría opta por suministrarse la vacuna en el Centro de Salud para evitar el alto costo (vacuna del segundo mes: USD 270). Entonces, lo que hemos visto es que muchos niños se han quedado rezagados por el miedo de ir al Ministerio o a los Centros.

Sin embargo, también hay casos de niños que antes no se vacunaban particularmente y ahora han optado por acudir a consultorios privados, pero es un número pequeño y muy limitado ya que no es barato. Sí hay una disminución total del índice de vacunación.

Entonces, ¿el retraso en la administración de vacunas podría ser un detonante para la reaparición de enfermedades que se creían erradicadas o controladas?

Puede darse. Cuando tú no quieres que haya infecciones o epidemias de cualquier enfermedad se debe tener un índice de cobertura que sea mayor al 90% de la población. Es decir que el 90 % de las personas deben estar vacunadas y, si eso no se logra, es muy fácil que las enfermedades entren nuevamente. Un ejemplo de eso es el sarampión, a pesar de estar a punto de ser controlado, si el índice de cobertura decrece, es muy probable que reaparezca.

Uno de los objetivos del ministerio de Salud es completar el ciclo de vacunación hasta diciembre de este año a través de visitas a los domicilios de personas que lo requiera, ¿cree que este plan puede ser efectivo tanto en términos logísticos como de salubridad?

Es algo muy difícil porque depende de cuantos médicos estén trabajando en los centros de salud y de la disponibilidad de brigadas para movilizarse. Es algo complicado, pero espero que lo hagan porque el Ministerio debe hacer algo porque los índices de cobertura en vacunas están muy bajos. Principalmente hablando de los niños cuyos padres no tienen los recursos suficientes para cubrir las vacunas en un consultorio privado y que tienen miedo de acudir a los centros de salud por temor a contagiarse de coronavirus.

En su caso específico, ¿tuvo casos de pacientes que querían vacunarse?

Sí. En mi caso incluso se ha incrementado el número de niños que llegan a vacunarse. Sin embargo, también está el caso de los niños que venían a los controles en mi consultorio pero que han decido suspender los controles por miedo a contagiarse.

En este momento, ¿cree que haya la seguridad necesaria en los centros de salud para proporcionar las vacunas?

De que tienen vacunas, sí tienen vacunas. Sin embargo, de lo que he visto, los centros de salud son espacios muy reducidos donde no hay mucha separación entre personas. En el mismo espacio donde vacunan a los niños también están tomando la temperatura a los niños enfermos. Entonces es algo peligroso.

 

Dra. María Augusta Guerrero

Especialista en pediatría

Tlf. 099 978 4255