El dolor de la fibromialgia puede ser intermitente, aparecer y desaparecer en todo el cuerpo. ¿Estás preparado para afrontar el dolor cuando aparezca?
Algunas veces, una de las cosas más difíciles de aceptar es que no existe ninguna cura para la fibromialgia. Mientras que los cambios en el estilo de vida y los medicamentos pueden reducir la intensidad del dolor o la fatiga causada por la fibromialgia, seguirás teniendo días buenos y días malos.
¿Por qué debes prepararte para un mal día?
Cuando el dolor o la fatiga por la fibromialgia son fuertes, quizá te resulte difícil pensar con claridad. Una exacerbación de los síntomas de la fibromialgia puede generarte estrés y desesperación si no estás preparado. No obstante, contar con un plan para seguir te brinda una sensación de control sobre tus signos y síntomas.
Anota tus opciones para afrontarlo. Ten a mano tu lista para que puedas tomarla cuando sientas que comienza una exacerbación.
Diferentes estrategias funcionan mejor para algunas personas que para otras. Algunas pueden funcionar adecuadamente para ti un día, pero no otro. Por ello, es conveniente contar con una variedad de opciones escritas entre las cuales elegir.
Evita el diálogo interno negativo
Los estudios han demostrado que lo que nos decimos dentro de nuestras mentes puede afectar nuestra percepción del dolor. Convertir los pensamientos negativos en positivos requiere práctica, pero vale la pena el esfuerzo.
Tomado de clínica Mayo