Se registra un grave retraso en los tratamientos, escasez de medicinas y dificultad para que los pacientes se trasladen a los centros de tratamiento oncológico.

La Fundación Jóvenes Contra el Cáncer, insiste en llamar la atención del Estado para atender la crítica situación por la que atraviesan por la crisis sanitaria que afecta al Ecuador y que ha puesto en riesgo la sensible y vulnerable salud de los niños y jóvenes que sufren de cáncer.

La situación es muy complicada a decir de Gustavo Dávila, presidente de la Organización no Gubernamental por “la falta de algunas medicinas, e imposibilidad de desplazamiento de pacientes oncológicos a hospitales de especialidad oncología y al retraso de tratamientos”.

Ante esta situación propone al Ministerio de Salud asumir decisiones como que las recetas que se entregan a los pacientes tengan vigencia de 90 días y que abastecimiento sea en los hospitales de la red pública de varias ciudades, así los pacientes o cuidadores puedan retirarlas. Un ejemplo, dice, un paciente de la ciudad de Pastaza que no puede ir a Quito pueda retirarlos en el Hospital del Puyo.

Solicita que los tratamientos, en caso de que los hospitales de especialidad no puedan atender a pacientes oncológicos, sean derivados a otros hospitales. “Podrían ser hospitales como la Policía, Fuerzas Armadas, SOLCA y otros, así no se suspenderá la continuidad del tratamiento”, señaló.

Finalmente pide que se implemente, con urgencia, las consultas on line, telemedicina, para pacientes oncológicos y enfermedades catastróficas y que esta modalidad sea aplicada en hospitales o desde casa con médicos oncólogos, paliativitas, terapistas y psico-oncólogos y se mantenga mientras persista el Estado de Emergencia.

La Fundación gestiona y entrega ayudas humanitarias kits de alimentos, mascarillas, gastos funerales y apoyo psico-emocional para solventar las necesidades de más de 1.000 guerreros en 18 provincias del Ecuador.